Noticia Destacada

Prevención y administración del aislamiento social

Diariamente el gobierno de la provincia de Santa Fe realiza una conferencia de prensa para comunicar lo concerniente a la situación generada por el COVID 19. Frente a las cámaras el secretario de Turismo, Lic. Alejandro Grandinetti, a su derecha el Dr. Osvaldo Aymo, director de la Agencia Provincial de Seguridad Vial, y a su izquierda la Dra. Fernanda Ferrer, médica infectóloga,  docente la Universidad Abierta Interamericana y miembro del equipo técnico de epidemiología que asesora al Gobernador en materia sanitaria. “Con respecto esta fase 4 del aislamiento queremos remarcar que esto es una manera de administrar el aislamiento social y preventivo obligatorio. No nos vamos a relajar con las medidas. Esta reapertura de las actividades económicas la vamos a hacer respetando los protocolos de higiene y seguridad. Seguimos remarcando el uso del barbijo y el lavado de manos, y cuando esto no se pueda con alcohol en gel”, explica la Dra. Ferrer y agrega: “Con respecto a los síntomas con 37,5º de temperatura, dificultad para respirar, tos, dolor de garganta, pérdida del gusto y el olfato se debe activar el dispositivo provincial llamando al 0800 555 6549. Las medidas deben continuar,  sobre todo con respecto a las personas que provengan del exterior o de otras provincias, deben cumplir el aislamiento de 14 días”.

 

- ¿Qué proyecciones se prevén en esta nueva fase de la cuarentena y que resultados observan en estos primeros días?

- La fase 4 del aislamiento social preventivo es la reapertura progresiva de las actividades, a fin de que circule el 75% de la población, con restricciones locales, donde cada jurisdicción pueda definir qué tipo de actividades se permitirán ejercer, pero se mantienen las prohibiciones de actividades a nivel nacional, como vuelos internacionales, apertura de escuelas y universidades, eventos recreativos, culturales, religiosos, deportivos, entre otros. La población se enfrentará al virus de manera escalonada a fin de comenzar a generar inmunidad poblacional.

 

- ¿Empieza a ser más determinante la conducta del ciudadano ante este escenario?

- Las medidas individuales son el pilar fundamental que determinan efectos a nivel colectivo. Es necesario tomar conciencia que la dinámica de la epidemia está influenciada directamente sobre las conductas de cada individuo.

 

- ¿Qué medidas, desde el equipo de epidemiología, han recomendado al Gobernador?

Las medidas de prevención en la comunidad continúan siendo fundamentales para evitar la diseminación del virus. Estas son el uso de barbijo para circular, y cuando no se pueda mantener la distancia ente personas de 2 metros, el distanciamiento social, el refuerzo de prácticas de higiene básicas como el lavado de manos con agua y jabón o alcohol al 70%, así como la limpieza de las superficies más utilizadas, especialmente teclados y teléfonos. Ahora, se ha agregado el cumplimiento del aislamiento en domicilio durante 14 días de personas que regresen de otras provincias, especialmente de Chaco, Buenos Aires y Córdoba, además de aquellas que provengan del exterior. Con respecto a los estudios virológicos, estos se realizan en casos sospechosos de infección (ante síntomas respiratorios y temperatura a partir de 37.5° C) con especial atención en esta fase a los casos con menos signo-sintomatología de personas que se desempeñen en la atención sanitaria, las que vivan o asistan a comunidades cerradas (geriátricos, cárceles, entre otras) y aquellos que trabajen o vivan en barrios vulnerables donde la diseminación pueda ser más rápida.

 

- ¿En caso de superarse esta fase, cuál sería la etapa siguiente?

La última fase es una nueva normalidad, donde se espera que circule el 75% de la población, manteniendo las medidas de higiene, y con regulaciones y restricciones homogéneas a nivel país. Las medidas son dinámicas y dependen de las características epidemiológicas (velocidad de duplicación de los casos, entre otras).

 

- ¿Qué características tiene esta nueva cepa del coronavirus?

- El COVID 19 es un virus con similitud genética a uno que infecta a los murciélagos y causa el SARS cov 2, una enfermedad pulmonar severa, similar al SARS-cov, reconocido en un brote en 2003.  Los primeros reportes epidemiológicos datan de finales de diciembre del 2019, cuando en Wuhan (China) reportaron un aumento de casos de neumonías en personas relacionadas a un mercado de animales, desde donde se cree que se expandió el virus. No se reportaron antecedentes de circulación previa de este virus en la comunidad, por lo cual el sistema inmune lo reconoce como nuevo, pudiendo así causar enfermedad. Se transmite por gotas de saliva, fómites (vehículo de transmisión) y eventualmente aerosoles (partículas más pequeñas de saliva) y heces. Causa una enfermedad respiratoria leve, con formas oligo-sintomáticas hasta neumonía y compromiso respiratorio grave, con compromiso alveolar y vascular. Con respecto al período de incubación es de 2 a 14 días, pudiendo transmitir la persona 24 hs previas al inicio de los síntomas.  El número de infecciones secundarias generadas a partir de un caso es de 2- 2,5 en COVID, siendo más alta que para influenza. Si bien en influenza el cuadro clínico varía de enfermedad leve a neumonía grave, las manifestaciones pulmonares en COVID pueden ser más severas, gracias a la respuesta inmune exagerada determinada por una tormenta inflamatoria.

 

- ¿Su tasa de mortalidad es comparable con otras influenzas?

- La comparación entre ambas tasas no es correcta debido a diversos factores. La letalidad de COVID que se mide actualmente en el mundo está dada por el número de casos positivos fallecidos sobre el total de los casos reportados. Mientras que en influenza se calcula una mortalidad estimada y no se presenta como un dato crudo. Existe además un sub-registro de muertes atribuibles a influenza, a diferencia de COVID donde se están reportando las muertes de todos los pacientes con diagnóstico confirmado, y en algunos lugares de alta circulación muertes probables por COVID. Las herramientas estadísticas para medir las tasas en ambas enfermedades son diferentes, y esto lleva a una incorrecta interpretación.