Noticia Destacada

Jamil Salmi fue distinguido como Doctor Honoris Causa por la UAI

Jamil Salmi, Doctor en Estudios del Desarrollo por la Universidad de Sussex, Inglaterra y Profesor Emérito de la UDP y reconocido a nivel internacional por haber trabajado como coordinador de los programas de educación superior del Banco Mundial, fue distinguido este miércoles por la Universidad Abierta Interamericana (UAI) como Doctor Honoris Causa por su trayectoria y comprometida labor en educación superior.

El auditorio de la sede Cisneros (Av. Montes de Oca 745) se llenó a las 18 horas para presenciar esta ceremonia académica de distinción de la UAI al asesor normativo y técnico en las reformas de educación superior de más de 95 países de todas las regiones del mundo, quien también asesoró el planeamiento estratégico en universidades en América Latina, Europa, Asia y África.

Jessica Ferradas, directora de la carrera de Periodismo de la UAI, condujo el evento y presentó a las autoridades de la universidad: Dr. Rodolfo De Vincenzi, Rector de la UAI; Dra. Ariana De Vincenzi, Vicerrectora Académica y Directora de la Especialización en Docencia Universitaria; y el Dr. Marcelo De Vincenzi, Decano de la Facultad de Tecnología Informática, y Vicerrector de Gestión y Evaluación.

El Dr. Jamil Salmi.

"Jamil Salmi es uno de los educadores más destacados en desarrollar y promocionar la educación superior y honra a la UAI con su presencia”, señaló Ariana De Vincenzi durante la presentación.

Por su parte, Rodolfo De Vincenzi expresó: “Quedan en evidencia los motivos por los que la UAI honra al Dr. Salmi. La pandemia aceleró procesos que nos exigió cambios y desafíos. El covid nos cambió el paisaje educativo como nunca. Es importante, como explicó Salmi, quien fue nuestra inspiración, que el aprendizaje en línea sea de calidad”.

Tras recibir la ovacionada distinción por parte de las autoridades de la UAI, Salmi tomó la palabra ante el aplauso de todos los presentes. “Estoy seguro de que en un futuro las personas podrán tener hasta 12 trabajos simultáneos. La mayoría de los cursos serán virtuales. El mundo está cambiando, pero la educación no tanto”, lanzó.

Para él, es imprescindible fortalecer la educación continua y reveló ante el público que su experiencia se ha fortalecido gracias a sus raíces, a sus padres, quienes eran de distintas nacionalidades: “Soy un puro producto de la internacionalidad y he absorbido la curiosidad de ambas partes (materna y paterna). Mi historia de vida me hizo ser lo que soy hoy. Además, trabajar en el Banco Mundial me ha dado la oportunidad de conocer la educación superior de muchos países del mundo”, explicó.

En esa misma línea añadió: “Para mí la educación superior fue una experiencia única y me describo como un estudiante permanente. Creo además que ha habido enormes cambios con la pandemia. Con el covid, la mayoría de las universidades debieron trasladarse a la educación en línea. Además, se han amplificado las diferencias que ya existían en la educación superior entre los distintos países. No obstante, esta crisis sanitaria ha desencadenado también múltiples innovaciones”.

El coro de la UAI al cierre del evento. 

Respecto a cómo las universidades deben afrontar estos cambios y desafíos del mundo actual, Salmi recomendó: “Creo que deben adaptarse a las nuevas modalidades postpandemia. Se trata de un cambio fundamental, dejando atrás el modelo tradicional de las universidades. La educación superior debe despertar la curiosidad, encender la pasión y apoyar el talento de los alumnos. Deben además ser fuertes para enfrentar los choques y las crisis. Deben verse como instituciones con un gran compromiso social y preparar a futuro a ciudadanos positivos, que promuevan la democracia y la igualdad. Lo más importante es nuestra identidad común, el respeto y la empatía, los valores que hacen que una sociedad viva en armonía”.

Asimismo, aseveró que las universidades deben romper con las fronteras políticas que “existen solamente en nuestras mentes” y “capacitar positivamente y estar preparadas para afrontar los problemas del planeta”. “Las universidades no pueden ser elitistas, sino que deben promover la igualdad e integridad”, subrayó.

Por último, y en sintonía con lo anterior, concluyó: “Creo que las instituciones más exitosas no son aquellas que han copiado a Harvard (por citar un ejemplo), sino las que han forjado una identidad propia, como la UAI, que ha mostrado resiliencia, que tiene un definido plan estratégico y una estructura sólida en la inclusión y calidad educativa. Le agradezco enormemente este premio a la UAI, a mis padres, hijos y esposa”.