Concurso Literario
Adrián Illañes, egresado del Colegio Oxford perteneciente al Grupo Vaneduc y actual empleado de la UAI, participó del Concurso Literario organizado por Metrovías y su cuento Evaristo quedó seleccionado como finalista entre los 30 mejores de un total de 1000 que se presentaron. Formando parte de la conmemoración por el Bicentenario, la temática del programa cultural Subtevive fue Relato de Inmigrantes.
El jurado del Concurso contó con la participación de prestigiosos referentes de la disciplina como Néstor Tirri, crítico y escritor, Poli Balestrini, directora de la Editorial CADAN, y Juan José Pepe Romero, Jefe de Gestión Cultural de SubteVive.
La entrega de las distinciones se realizó en el Centro Cultural Borges y ahí estuvimos con Adrián para vivir junto a él esta experiencia.
¿Adrián, cómo surgió la posibilidad de participar de este Concurso Literario?
Vi el cartel en el subte y me interesó. Tenía que escribir algo relacionado con la temática de los inmigrantes, y allí nació Evaristo, el personaje surgió solo.
¿Cómo nació en vos esta afición a la literatura?
Crecí con los libros, viví toda mi infancia con mi abuelo, que era una persona muy culta y tenía una biblioteca muy importante. Él nos inculcó la literatura, la pintura, yo me aboqué a la escritura, no me siento tan cómodo pintando.
¿Escribiste más cuentos?
Si, tengo otros cuentos escritos, pero en un futuro me encantaría poder escribir una buena novela.
¿Tenés un escritor como referente?
Mi ejemplo es Julio Cortázar, sin lugar a dudas. En un segundo lugar Roberto Arlt. Por otro lado, en el cuento Evaristo tomé un poco de Sur de Jorge Luis Borges.
¿Cómo te sentiste al estar entre los 30 seleccionados entre 1000 participantes?
Me sentí muy bien, fue muy gratificante estar entre los treinta, un momento muy importante. Además, considero que el cuento ganador fue excelente. Esta fue una experiencia muy linda.
¿Tenés pensado participar de otros concursos literarios?
Claro, me gustaría participar de un curso con la temática de algo que ya hice.
¿Qué es lo más importante que te llevas de esta experiencia?
Mucha gente leyó mi cuento, aunque no es mi cuento favorito, seguramente porque escribí sobre algo determinado, tal vez no pensé en la obra en sí misma sino en lo que iba a conseguir a través de la obra. Ese es un gran aprendizaje que me llevo.
Realizaste todos tus estudios en el Colegio Oxford, ¿cómo fue tu paso por esa Institución?
Mi paso por el colegio fue muy bueno, cuando uno es estudiante no es conciente de todas las cosas positivas, por ahí porque es una etapa de rebeldía, pero todo lo que aportó en mí lo valoro día a día. La gente es muy buena y mi paso fue muy positivo.
¿Actualmente estás trabajando en la UAI?
Si, es un lugar donde me siento muy tranquilo y protegido, se tiene en cuenta el aspecto humano del empleado, y eso te hace sentir cómodo.
¿Qué carrera tenés pensado comenzar en un futuro cercano?
Mi idea es estudiar publicidad, no es algo muy vinculado a la literatura, pero la creatividad es algo fundamental para ambas cosas.
Adrián tiene 18 años y es un ejemplo más que demuestra que las recompensas llegan cuando uno se esfuerza y trabaja en lo que quiere. Sin dudas que el esfuerzo y una buena educación llevan a una persona a cumplir sus objetivos/metas. Adrián en base a los valores aprendidos está comenzando un camino muy promisorio.
El jurado del Concurso contó con la participación de prestigiosos referentes de la disciplina como Néstor Tirri, crítico y escritor, Poli Balestrini, directora de la Editorial CADAN, y Juan José Pepe Romero, Jefe de Gestión Cultural de SubteVive.
La entrega de las distinciones se realizó en el Centro Cultural Borges y ahí estuvimos con Adrián para vivir junto a él esta experiencia.
¿Adrián, cómo surgió la posibilidad de participar de este Concurso Literario?
Vi el cartel en el subte y me interesó. Tenía que escribir algo relacionado con la temática de los inmigrantes, y allí nació Evaristo, el personaje surgió solo.
¿Cómo nació en vos esta afición a la literatura?
Crecí con los libros, viví toda mi infancia con mi abuelo, que era una persona muy culta y tenía una biblioteca muy importante. Él nos inculcó la literatura, la pintura, yo me aboqué a la escritura, no me siento tan cómodo pintando.
¿Escribiste más cuentos?
Si, tengo otros cuentos escritos, pero en un futuro me encantaría poder escribir una buena novela.
¿Tenés un escritor como referente?
Mi ejemplo es Julio Cortázar, sin lugar a dudas. En un segundo lugar Roberto Arlt. Por otro lado, en el cuento Evaristo tomé un poco de Sur de Jorge Luis Borges.
¿Cómo te sentiste al estar entre los 30 seleccionados entre 1000 participantes?
Me sentí muy bien, fue muy gratificante estar entre los treinta, un momento muy importante. Además, considero que el cuento ganador fue excelente. Esta fue una experiencia muy linda.
¿Tenés pensado participar de otros concursos literarios?
Claro, me gustaría participar de un curso con la temática de algo que ya hice.
¿Qué es lo más importante que te llevas de esta experiencia?
Mucha gente leyó mi cuento, aunque no es mi cuento favorito, seguramente porque escribí sobre algo determinado, tal vez no pensé en la obra en sí misma sino en lo que iba a conseguir a través de la obra. Ese es un gran aprendizaje que me llevo.
Realizaste todos tus estudios en el Colegio Oxford, ¿cómo fue tu paso por esa Institución?
Mi paso por el colegio fue muy bueno, cuando uno es estudiante no es conciente de todas las cosas positivas, por ahí porque es una etapa de rebeldía, pero todo lo que aportó en mí lo valoro día a día. La gente es muy buena y mi paso fue muy positivo.
¿Actualmente estás trabajando en la UAI?
Si, es un lugar donde me siento muy tranquilo y protegido, se tiene en cuenta el aspecto humano del empleado, y eso te hace sentir cómodo.
¿Qué carrera tenés pensado comenzar en un futuro cercano?
Mi idea es estudiar publicidad, no es algo muy vinculado a la literatura, pero la creatividad es algo fundamental para ambas cosas.
Adrián tiene 18 años y es un ejemplo más que demuestra que las recompensas llegan cuando uno se esfuerza y trabaja en lo que quiere. Sin dudas que el esfuerzo y una buena educación llevan a una persona a cumplir sus objetivos/metas. Adrián en base a los valores aprendidos está comenzando un camino muy promisorio.