Aprendizaje y servicio con compromiso social
Gracias a la gestión conjunta de las licenciatura en Relaciones Públicas y Diseño Gráfico de la Sede Rosario, alumnos de estas carreras pudieron aportar su trabajo y conocimientos en una verdadera experiencia de aprendizaje servicio con la ONG Meraki, a partir del desarrollo de una identidad de marca y el diseño de un plan de comunicación en redes para contribuir con la organización en la promoción de sus acciones, y convocar al público a sumarse a su propuesta.
Meraki cuenta con personería jurídica y allí trabajan desde chicos de 18 años hasta personas de 30. Con el aporte y colaboración de los vecinos, esta ONG persigue la defensa de los derechos de niños, niñas y mujeres en estado de vulnerabilidad. Coordinados por la Mg. Barbara Verino (Docente de la Lic. en Relaciones Públicas) y la Mg. Karen Kuschner (Directora de la Licenciatura en Diseño Gráfico), los alumnos de Diseño Gráfico, Rosana Vasta, Matilde Gobbo Murga y Gian Franco Commiso, colaboraron en la creación de una nueva identidad marca y la planificación de una comunicación para ser viabilizada a través de las cuentas que Meraki posee en redes sociales.
“La ONG poseía una marca que no reflejaba quién era, ni en qué área desarrollaba su actividad, por lo que era urgente y necesario realizar un restyling de marca. Para trabajar la nueva identidad se tuvo en cuenta la misión y visión de la organización”, explica Matilde. “Contaban con una marca gráfica que no era de su propiedad y en caso de crecer, o tomar más relevancia, hasta podían tener problemas legales. Así que lo primero fue plantear una nueva marca gráfica. Luego, se creó un sistema gráfico para utilizar como base en todas las publicaciones de modo que cualquiera que se encargara del manejo de redes sociales tenga un sustento y una base sobre la cual trabajar, creando una armonía visual en cada red social en la que Meraki está presente”, complementa Gian Franco.
Luego de reunirse con los integrantes de la ONG, los alumnos les plantearon la necesidad de cambiar la marca lo antes posible, por lo que solicitaron referencias en cuanto a otras organizaciones que tomaran como ejemplo a seguir respecto a lo que pretendían comunicar. A partir del análisis de diferentes experiencias nacionales e internacionales de piezas gráficas, notas, posteos y medios de captación de seguidores y colaboradores, comenzaron a crear los primeros bocetos e ideas de marca que fueron ajustando conjuntamente. “Con la marca ya aprobada, se presentaron elementos como fondos, íconos, y plantillas para que se puedan usar a la hora de realizar comunicaciones en las redes”, comenta Gian Franco y agrega: “Por último se entregó el material en video, la animación de la marca, fondos animados para stories de Instagram, placas animadas para usos como agradecimientos y visibilización de los medios de contacto de la organización”. Rosana cuenta que en una primera instancia se definieron las audiencias en redes sociales. “Pudimos ver que su comunicación iba dirigida a quienes denominamos como ‘Colaboradores’ (personas que se acercan a la institución para ayudar en su tarea cotidiana, para donar alimentos, útiles, etc.), ‘Beneficiarios’ (los niños y familias que reciben la ayuda y apoyo de la ONG), ‘Actores’ (adolescentes y jóvenes que forman parte de Meraki y colaboran activamente en la tarea cotidiana) y ’Público en General’ (potenciales colaboradores, beneficiarios y/o actores)”.
Matilde advierte que “el resultado final fue una marca isologotípica (presenta un isotipo y un logotipo) que reúne los conceptos de mujeres y niños en situación de vulnerabilidad, cooperación, política social, lucha colectiva, perspectiva de género, barrio protagonista, compromiso, unión, trabajo colectivo”.
Los alumnos lograron planificar un sistema de piezas gráficas para estandarizar las publicaciones. “De acuerdo al análisis realizado de las actividades que lleva a cabo Meraki, le hicimos una propuesta de comunicación dividida en ‘Efemérides’, ‘Nuevos Proyectos’, ‘Acciones’ y ‘Comunicación Institucional’. Todas instancias de comunicación que ya generaban desde la ONG, pero que intentan ordenar el Feed de su Instagram”, advierte Rosana y concluye: “Fue una experiencia muy especial, conocer el trabajo que hacen, la idea de ayudar a otros y sentirnos un poco parte de su tarea, fue muy gratificante para mí. Acciones como la de Meraki, nos motivan a comprometernos con la realidad en que vivimos y sentir que realmente, como dicen ellos, nadie se salva solo”.