Una comunicación saludable
*Por Juan Mascardi
“Los periodistas y los trabajadores de los medios de comunicación de todo tipo son cruciales para ayudarnos a tomar decisiones informadas. En una pandemia, esas decisiones pueden salvar vidas”, expresó el Secretario General de Naciones Unidas. Desde 2005, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estableció algunos principios básicos para la comunicación de brotes infecciosos: confianza, anuncios tempranos, transparencia, escuchar al público y planificación.
Al igual que el crecimiento exponencial del COVID 19 facilitado por la circulación de personas y bienes, las noticias se desplazan con la misma velocidad gracias a Internet permitiendo llegar a cualquier punto del planeta. En este sentido la OMS remarca que la gestión efectiva de la comunicación en una crisis sanitaria es una herramienta primordial para el control del brote.
Los medios masivos influyen decididamente en la percepción que la población tiene sobre la pandemia. En una primera etapa, al igual que el resto de la ciudadanía, se vieron sorprendidos por la situación reaccionando espasmódicamente tratando de narrar lo inenarrable. Con el devenir la pandemia la posibilidad de convertirse en facilitadores de una información verificada y chequeada, terminó por virar hacia periodismo más humano y de servicios. La comunicación clara y precisa orienta la conducta de los ciudadanos para reducir al mínimo los riesgos de contagio y la transmisión de la infección.
La imágenes provenientes del Viejo Continente generan temor, y en algunas oportunidades el lenguaje científico de los expertos consultados exige el esfuerzo de interpretación para llegar con un mensaje simple y entendible, que no exacerbe la incertidumbre, y que explique con claridad cuáles son las conductas preventivas en esta “nueva normalidad”, los recaudos que deben tomarse, qué objetivos se persiguen y cuáles son los beneficios que se obtendrán.
La difusión de comunicados oficiales y datos rigurosos provistos por las autoridades sanitarias competentes reduce la posibilidad de caer en inexactitudes que coadyuven a la propagación del virus. Como contraparte, la multiplicidad de agentes informativos, potenciados por las redes sociales y los servicios de mensajería instantánea, provocan una saturación sin precedentes convirtiéndose en un desafío para los comunicadores que se enfrentan diariamente a una verdadera infodemia, así como a la circulación de noticias falsas, conocidas como fake news. Los medios de comunicación se tornaron en una fuente confiable, permitiendo que la ciudadanía los adoptara como verdaderos vehículos para conocer la evolución de la pandemia, tanto desde el punto de vista sanitario como para la práctica de conductas responsables.
La pospandemia debería encontrar a todos los actores del ecosistema de la comunicación trabajando fuertemente en un mensaje unívoco contra la discriminación y la estigmatización de personas que hayan sufrido la enfermedad o que potencialmente se encuentren en una situación de riesgo.
Las políticas de aislamiento social y cuarentena obligatoria encontraron a muchas personas lejos de su hogar sin tener un horizonte claro para la repatriación. Según anunció la Cancillería argentina casi 200 mil personas iniciaron sus trámites para retornar, concretándolo casi en su totalidad. Muchos de ellos utilizaron tanto redes como medios de comunicación para visibilizar su reclamo y alertar sobre las contingencias sufridas, a la vez que llevaron tranquilidad a sus familias, mientras el Estado coordinaba las gestiones el regreso. Alumnos, docentes y graduados de la Universidad Abierta Interamericana que se hallaban en el exterior recurriendo a las diferentes vías de comunicación que la institución dispone para contar sus experiencias, sostener el proceso de aprendizaje y mantener el contacto con sus afectos.
La Universidad viene trabajando desde hace mucho tiempo, en un contexto diferente, el uso de la tecnología como un puente de contacto, generando una aproximación concreta para el desarrollo permanente de habilidades que apuntan directamente al perfil profesional de periodistas, productores y realizadores audiovisuales.
*Director Lic. en Periodismo - Lic. en Producción y Realización Audiovisual