La UAI presente en el aniversario de REDIBAS: educación con impacto social

La Red Iberoamericana de Aprendizaje-Servicio (REDIBAS) está conmemorando su vigésimo aniversario, celebrando dos décadas de promoción y consolidación de una pedagogía transformadora. Creada en Buenos Aires en 2005, reúne a más de 90 instituciones de América, España y Estados Unidos, siendo la Universidad Abierta Interamericana (UAI) una de las entidades miembro.

REDIBAS ha sido un espacio fundamental para consolidar la investigación en el campo, compartir recursos y dar visibilidad a experiencias educativas que muestran cómo se puede enseñar y aprender de manera diferente. En este marco, se llevó adelante el encuentro anual donde la magister Karen Kuschner, directora de la Licenciatura en Diseño Gráfico de la Sede Rosario, representó a la UAI y a la Red Argentina de Aprendizaje y Servicio Solidario (RAAySS) en una jornada de distinción por la trayectoria de la Red, y una instancia única para proyectar su futuro con renovado impulso.

“La jornada inició con la revisión de una línea de tiempo interactiva, que visualizó los principales hitos y acciones llevadas a cabo en los últimos 20 años. Esta dinámica permitió un reconocimiento del esfuerzo colectivo y la evolución de la comunidad que ha crecido de manera exponencial”, señaló Kuschner y agregó: “La presentación de un mapa interactivo de redes nacionales evidenció la expansión y el alcance global del aprendizaje servicio, demostrando que su impacto trasciende las fronteras geográficas”.

 

Una pedagogía que une conocimiento y compromiso

“Definimos al aprendizaje y servicio solidario como una propuesta educativa que articula proyectos solidarios, procesos de enseñanza y aprendizaje protagonizados por niños, niñas y/o jóvenes, y desarrollados junto con la comunidad”, explicó Kuschner y añadió que “esto implica llevar adelante iniciativas que estudien la realidad para descubrir necesidades concretas y sentidas de la comunidad, para luego planificar e implementar acciones con el fin de transformarlas, articulando de manera intencional con los procesos de enseñanza y aprendizaje”.

Estos proyectos son protagonizados activamente por niños y jóvenes en todas las etapas del proceso, incluyendo la toma de decisiones, y acompañados por un docente, educador u orientador que viabiliza el proceso y es el garante de la intencionalidad educativa, buscando transformar a todos los involucrados en este camino de manera dialógica y colaborativa.

Contar con una red nacional tiene una cantidad de beneficios, entre los que se destacan la posibilidad de establecer conexiones significativas con profesionales que comparten intereses y objetivos similares a largo plazo, así como el intercambio de conocimientos y experiencias entre sus miembros. También, se desarrollan nuevas habilidades al interactuar con personas que tienen experiencia en el campo, y beneficiarse de su orientación y asesoramiento”, comentó.

 

Proyectando una política educativa transformadora

El programa del encuentro, llevado a cabo en el Salón Blanco del Palacio Pizzurno (Ciudad Autónoma de Buenos Aires), continuó con un taller reflexivo orientado a analizar preguntas clave sobre el desarrollo de REDIBAS. Allí, se abordaron los desafíos más relevantes enfrentados a lo largo del tiempo, desde la necesidad de una mayor institucionalización hasta la búsqueda de una consolidación de la práctica del aprendizaje servicio como una política pública a diversos niveles de gobierno. Asimismo, se examinaron las estrategias para mantener una participación equilibrada entre universidades, escuelas y organizaciones no gubernamentales (ONG), destacando la importancia de la diversidad de aportes sectoriales para el éxito de los proyectos.

Los representantes de las distintas entidades discutieron las relaciones entre las redes nacionales y sus respectivos territorios, gobiernos y marcos legislativos. “Este análisis permitió entender cómo el aprendizaje servicio se integra en las políticas educativas y sociales para asegurar su sostenibilidad. Las experiencias compartidas por distintos países demostraron los avances logrados en la articulación entre instituciones educativas, sociedad civil y organismos gubernamentales”, aseveró Kuschner.

El encuentro culminó con un gesto simbólico de gran relevancia: el depósito de una visión a futuro para la Red y un compromiso personal de cada representante en un cofre del tiempo, que será abierto dentro de cinco años. Este acto sintetizó la esencia de la jornada, que se centró en la responsabilidad individual para el logro de un objetivo colectivo.

Tras su participación en el evento, la Mg. Kuschner reafirmó que el aprendizaje servicio es más que una metodología, es un movimiento con un impacto social significativo. “El intercambio con un grupo comprometido y diverso proporcionó conocimientos e inspiración, así como un renovado compromiso con la visión de la red. Se anticipa que, en un lustro, el cofre revelará una red aún más fortalecida, cuyo impacto transformador habrá crecido gracias a la dedicación de cada uno de sus miembros”, concluyó.