Lactancia materna como derecho humano fundamental
Por Julia Inés Roca*
Cada año, durante la primera semana del mes de agosto, se celebra la “Semana Mundial de la Lactancia Materna” con el objetivo de fomentar y hacer valer este derecho. Asimismo, se brinda información relacionada al amamantamiento y se intenta generar conciencia en la sociedad sobre la necesidad de su reconocimiento, y de que no haya obstáculos para el ejercicio de este derecho.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que “la lactancia materna es la forma ideal de aportar a los niños pequeños los nutrientes que necesitan para un crecimiento y desarrollo saludables. Prácticamente todas las mujeres pueden amamantar, siempre que dispongan de buena información, y del apoyo de su familia y del sistema de atención de salud. La OMS recomienda la lactancia materna exclusiva durante seis meses, la introducción de alimentos apropiados para la edad y seguros a partir de entonces, y el mantenimiento de la lactancia materna hasta los 2 años o más”.
Por su parte, el Consejo de Derechos Humanos de la ONU emitió en el año 2016 un comunicado en el cual reconoce que el amamantamiento es una cuestión de derechos humanos tanto para bebés como para madres y que, por lo tanto, debe ser fomentado y protegido de acciones que buscan impedirlo. En ese sentido, indicaron que los Estados no utilizan los mecanismos que tienen a su alcance para combatir las prácticas inadecuadas de comercialización de sucedáneos a la leche materna y les obliga a ponerlos en marcha.
Además, establece que las tradiciones familiares y culturales, la estigmatización que sufren las mujeres que amamantan en el trabajo o en lugares públicos, y la falta de información de los trabajadores de la salud son algunas de las tantas causas que impiden la continuación de la lactancia materna.
De acuerdo a la OMS, se calcula que anualmente se evitarían con la lactancia materna iniciada dentro de la primera hora de vida del bebé (siendo exclusiva durante los primeros seis meses y sostenida con alimentación complementaria hasta los dos años de vida), la muerte de 820.000 niños en el mundo por año.
La lactancia materna es un derecho de las madres y de los niños y niñas, siendo, además, fundamental para una adecuada alimentación y protección de su salud. Este derecho humano debe ser respetado y protegido. La importancia de la protección legal del derecho a amamantar y a ser amantado radica en que es un derecho humano fundamental que está relacionado con el derecho a la salud y a la alimentación.
Toda mujer tiene derecho a ejercer este derecho, nadie puede impedírselo. Para ello es fundamental que se eliminen los obstáculos para poder ejercerlo. Motivo por el cual, los Estados y la sociedad, tienen el deber de garantizar a las mujeres su ejercicio pleno, en especial, en el caso de las madres trabajadoras.
A nivel mundial, en la mayoría de los países se protege y respeta el derecho a la lactancia. En este sentido, nuestro país incorporó en su sistema normativo numerosos instrumentos que garantizan a la mujer el derecho a amamantar y a los bebés a ser amamantados, gozando de protección constitucional.
Es necesario seguir generando conciencia sobre la importancia de este derecho desde nuestro espacio, no sólo entre las mujeres porque este derecho, en definitiva, nos involucra a todos como sociedad, como familia, como equipo de trabajo. Por una sociedad más equitativa, comprensiva y humana.
* Abogada. Graduada y auxiliar docente de la carrera de Abogacía en la Universidad Abierta Interamericana – Sede Rosario.