Primera parte - Radiografía de una pandemia

La doctora Gilda Tamagno es una reconocida médica infectóloga de larga trayectoria en la salud pública santafesina.  Docente de la carrera de Medicina de la Sede Rosario y directora del Hospital Provincial Centenario de Rosario, ofrece un pormenorizado análisis sobre la situación sanitaria y epidemiológica generada por el COVID-19.

 

Los coronavirus pertenecen a un grupo de virus de la familia coronaviridae, que presenta cuatro géneros: alfa, beta gamma y delta. Existe un grupo de beta coronavirus endémicos que causan enfermedad leve de las vías respiratorias y dos betacoronavirus zoonoticos que causaron brotes epidémicos como el SARS (Síndrome Respiratorio Agudo Severo) en el año 2002 y el MERS (Síndrome Respiratorio del Medio Oriente), en 2012. En diciembre de 2019, en Wuhan (China), se describieron casos de neumonía grave. En enero del 2020 el agente causante fue identificado como un nuevo beta coronavirus (2019-nCoV) distinto del SARS-CoV y el MERS-Cov. Se identificó el genoma completo del virus y se desarrollaron diferentes protocolos de detección. En febrero se lo denominó Covid 19 y la enfermedad fue declarada pandemia por la Organización Mundial de la Salud el 11 de marzo del 2020.

Desde el inicio de la pandemia, hubo un claro incremento de casos. En Argentina, desde marzo con 1054 casos (informe del 31 de marzo),  a la fecha con 196.543 (1 de agosto).

En la Provincia de Santa Fe, se informaron 77 casos en marzo, contra 937 casos a principios de agosto. Resulta interesante evaluar lo sucedido en este último mes, donde la progresión de la enfermedad se puede observar en el siguiente gráfico, en el que la duplicación de casos se produce en el término de menos de 25 días.  

Al no disponer de un tratamiento antiviral ni vacuna para controlar la enfermedad, las medidas de aislamiento social son la única herramienta eficaz para disminuir la propagación del virus y cuidar la salud de todos. Las mismas consisten en: mantener la distancia de 2 metros entre las personas, uso de tapabocas, higiene de manos, toser o estornudar en el codo, evitar conglomerados, ventilar los ambientes y la limpieza frecuente de las superficies en contacto frecuente con las manos.

Si estas medidas no se cumplen, la circulación y propagación del virus, es inevitable, con el consecuente aumento de enfermos, como hemos podido observar particularmente en los últimos días. Ante el relajamiento de las medidas de protección personal con las consecuencias ya descriptas deben implementarse medidas considerando los siguientes parámetros:

- Las etapas de administración de aislamiento se establecen teniendo en cuenta las 5 fases de la pandemia que considera: el porcentaje de la población infectada y la disponibilidad de recursos para dar respuesta a esta situación (personal de salud, número de camas disponibles en áreas de internación y cuidados críticos).

- El tiempo de duplicación de casos. Se sabe que el R0 (numero reproductivo) del Covid 19 es  aproximadamente 2,5, es decir que una persona infectada tiene la capacidad de transmitir el virus a otras dos/tres, lo que puede verse afectado según la cantidad de personas dentro de un ambiente, las características edilicias (ventiladas o no) y si estas se encuentran al aire libre y con o sin distanciamiento, y/o elementos de protección. En Santa Fe la duplicación esta entre 15 a 25 días por lo que entraríamos en una fase 3 de aislamiento con una movilidad poblacional del 50% y restricciones a nivel provincial teniendo en cuenta otros factores jurisdiccionales.

La toma de decisiones a implementar debe ser por cada jurisdicción, teniendo en cuenta no solo la situación epidemiológica, sino también las características que presenta cada localidad.

Así podemos clasificarlas en:

- Zonas sin casos o con casos importados.

- Zonas con casos esporádicos o transmisión local por conglomerados/brotes controlados.

- Zonas con transmisión local con predominio de conglomerados y casos confirmados  de posible transmisión comunitaria.

- Zonas con transmisión comunitaria sostenida.

Teniendo en cuenta la nueva clasificación según situación epidemiológica, se ingresaría en la zona 3, con las siguientes recomendaciones:

-Seguimiento y cuarentena estricta de los contactos estrechos con el fin de prevenir la transmisión (priorizando personas mayores de 60 años y con factores de riesgo).

-Medidas de contención comunitaria: control de brote.

-Disminución de la circulación de personas y restricción de actividades focalizadas según la situación epidemiológica y capacidad de respuesta del sistema de salud (siendo esto evaluado en forma continua). En la actualidad el porcentaje de ocupación de pacientes internados con Covid 19 positivo es bajo, de un 5 a un 12%, por lo que no constituye un riesgo para nuestro sistema de salud.

-Fortalecimiento de estrategias de comunicación (medidas de prevención, medidas a tomar en aislamientos domiciliarios de casos y de contactos estrechos, educación en responsabilidad individual y colectiva)

- Intensificación de los mensajes sobre medidas de aislamiento social.

- Refuerzo de las medidas de protección de poblaciones vulnerables (tercera edad, institucionalizados).

En este último mes se duplicaron los casos de coronavirus en la provincia y en la ciudad con una clara aceleración ascendente de la curva, teniendo además en Rosario circulación comunitaria. Por todo lo expresado, y de persistir esta tendencia pasaríamos de una fase 4, con una movilidad poblacional del 75% a un 3 con restricción de la movilidad poblacional del 50%, con disposiciones nacionales y excepciones provinciales. A medida de que la velocidad de duplicación de casos se acorta mayor serán las restricciones y la circulación de la población para evitarlo.