Salud y calidad de vida. La interdisciplina como herramienta fundamental

La comunidad educativa de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud vivió, con gran éxito, las XXIII Jornadas Nacionales y las II Internacionales del Área de la Salud. Bajo el lema “Juntos aprendemos mejor”, este espacio busca la participación interactiva de estudiantes, docentes, graduados e investigadores, a través de integraciones interdisciplinarias que les permitan realizar los aportes de las carreras vinculadas a la salud para contribuir con sus conocimientos a una visión de actualización bio – psico - social en la prevención, curación y rehabilitación de la salud del colectivo comunitario.

La Vicerrectora Académica de la UAI, Dra. Ariana De Vincenzi, participó del acto de apertura caracterizando a las jornadas como un espacio de trabajo cooperativo donde se difuminan los roles de autoridad que separan a los docentes y los alumnos. “Este es un desafío muy grande, romper esa asimetría propicia la construcción de una comunidad de aprendizaje. Un espacio donde diferentes actores interactúan asumiendo distintos roles y persiguiendo un mismo objetivo”, aseveró.

Con el lema “Juntos aprendemos mejor” como bandera, la doctora De Vincenzi, ponderó la participación de profesores, estudiantes, graduados, y reconocidos profesionales nacionales e internacionales, que se enriquecen de todas las experiencias, conocimientos y diversidad de perspectivas en torno al avance de la ciencia y la tecnología aplicadas al avance de la medicina.

Asimismo, mencionó que el plan de estudio de la carrera de Medicina, recientemente actualizado, “se constituye como uno de los más innovadores en lo que refiere a los trayectos formativos flexibles, muy articulados con un contexto versátil, cambiante, donde el alumno estará constantemente interpelado por la práctica del ejercicio profesional”. El plan, según palabras de la doctora De Vincenzi, “persigue como uno de sus objetivos la generación de un ámbito innovador de estudio, investigación y transferencia”. “En este sentido, las Jornadas son un aporte sustantivo a este objetivo”, afirmó.

“Robots que realizan operaciones, el avance de la telemedicina, o la propia creación de una vacuna contra un virus que azotó al mundo, son parte de una realidad que impone una necesaria integración entre la ciencia y la tecnología, por lo que la Universidad asume ese desafío con la creación de dos centros de simulación médica, tanto en Rosario como en Buenos Aires”, reveló.

La doctora De Vincenzi consideró que la sociedad está enfrentando una rápida evolución, con una alta volatilidad en el contexto laboral, dando lugar a nuevos trabajos y otros que desaparecen. “Esto interpela a la Universidad a configurar otro tipo de profesionales, formado en competencias. Ya no resulta suficiente la formación de graduados que dominen un saber experto, o que adquieran habilidades y destrezas, sino que deben tener la capacidad de integrar los conocimientos, las habilidades, y las destrezas, pero también los valores adquiridos en la Universidad y en el contexto profesional para poder intervenir de una manera efectiva y pertinente, resolviendo problemas que se evidencian en contextos cambiantes”, manifestó.

La Vicerrectora Académica catalogó estas jornadas como “un terreno fértil para el desarrollo de determinadas competencias, como por ejemplo la comunicación asertiva”. “Saber comunicar, transmitir con firmeza y convicción aquello que queremos, nuestra forma de pensar, es sustantivo en la educación universitaria. También el razonamiento clínico y crítico que se constituyen en estos espacios, además de configurar un escenario interdisciplinario donde la salud excede al campo de la intervención asistencial”, concluyó.

El Dr. Jorge Kilstein, director de la carrera de Medicina de la Sede Rosario, definió a las Jornadas como “un clásico” y destacó la labor del Dr. Juan Carlos Barrovecchio (Presidente de las Jornadas Interdisciplinarias) en la organización de las mismas. “Esta edición abarca temas de indudable interés, como la medicina del estilo de vida, un campo disciplinar que es el presente y el futro. También la investigación, como publicar un artículo científico, y un encuentro con graduados para saber como acreditar los títulos en el extranjero, entre otras temáticas. Alumnos, docentes, graduados y toda la comunidad educativa nos congregamos para compartir experiencias y seguir aprendiendo”.

Por su parte el Dr. Facundo Correa (Director de la carrera de Medicina de la Sede Buenos Aires) destacó dos cuestiones que se ponen de manifiesto en las jornadas: la internacionalización y la simulación. “En ese sentido, nosotros hemos sido pioneros, innovadores, trabajando con los centros de simulación y convencidos que las competencias que deben tener nuestros graduados se forman progresivamente en los espacios de práctica. Valoró este ámbito de conocimiento y reflexión, así como la participación de los graduados en las actividades que la carrera lleva adelante.

 

Medicina del estilo de vida

A lo largo de las dos jornadas, más de 300 personas estuvieron en la presentación de 55 trabajos tutorados de estudiantes sobre diferentes temas clínicos, pósters, macro modelos y moulage (técnicas de simulación de lesiones para capacitar personal médico), mientras que docentes y profesionales formaron parte de mesas redondas sobre contenidos pedagógicos y brindaron diferentes conferencias magistrales, abordando las frecuencias de las alteraciones biopsicosociales producidas por las diversas patologías como consecuencias de las variadas acciones casuales y por la evolución cronológica de los sistemas orgánicos.

En la previa de la conferencia inaugural, el Dr. Guillermo Weisburd (adscripto al Decanato de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud de la UAI) presentó a la Dra. Evelyn Vanina Re (Médica cardióloga, posgraduada en nutrición basada en plantas) e introdujo el concepto que sería el eje de la charla:  medicina del estilo de vida. Aseguró que esta nueva especialidad va a ser una etapa superadora en el abordaje de enfermedades crónicas no transmisibles y reveló que en el nuevo plan de estudio de la carrera de Medicina existe ya una materia para formar a los futuros profesionales en la disciplina.

La doctora Re definió a la medicina del estilo de vida como una especialidad que surge de la medicina convencional, y que está basada en evidencia científica. Esta se ocupa de las intervenciones en el estilo de vida de las personas que afectan al ser humano y su calidad de vida y que se enfocan en el origen de las patologías crónicas no transmisibles en todos los niveles de causalidad.

“La medicina del estilo de vida propone una alimentación saludable, basada en plantas, que se componen de varios grupos alimentarios: verduras, legumbres, frutas, frutos secos. Es el patrón alimentario recomendado para la prevención y el tratamiento de enfermedades crónicas”, afirmó y agregó: “Sabemos también la importancia del ejercicio, que es un camino a la salud. El músculo es un gran órgano endócrino, liberador de encimas, y que tiene ejes endócrinos con todos los sistemas y aparatos de nuestro cuerpo”.

En su disertación, mencionó que la American Heart Association publicó recientemente un estudio que ubica al sueño como uno de los pilares de la salud. “En el descanso sabemos que se terminan de consolidar funciones biológicas imprescindibles”, ratificó.

Otro de estos pilares de la salud mencionados por la doctora Re es el control del stress, y su impacto en enfermedades metabólicas, cardiovasculares o el cáncer. “La necesidad de implementar técnicas para su manejo generan un cambio en la arquitectura neuronal, su plasticidad y en la sinapsis”, explicó. En esta “guía” para una vida saludable incluyó también, la interrupción del consumo de sustancias tóxicas, como el tabaco, el alcohol o las drogas, y la promoción de los vínculos sociales positivos, las buenas relaciones interpersonales y la conformación de una red de contención para la persona que está atravesando un gran cambio de hábito.