Inteligencia Artificial: cómo es “Elektra”, el robot profesor 4.0 de la UAI

Desde el Laboratorio de robótica física e inteligencia artificial del Centro de Altos Estudios en Tecnología Informática (CAETI) de la UAI nació "Elektra", una profesora robot virtual con Inteligencia Artificial (IA), que es asistente en la cátedra de Robótica de 3er. año, de la carrera de Ingeniería en Sistemas Informáticos, que se articula con otros robots físicos que ya se encuentran implementados.

Elektra es la "hermana" de "Jaime", un profesor robot anterior que fue presentado en el XX Congreso Internacional en Innovación Tecnológica Informática (CIITI) de 2022, y es clave para lo que vino después. Elektra es un chatbot de última generación tiene tecnología del ChatGPT 3, y puede ayudar a los alumnos a estudiar. Los estudiantes pueden preguntarle cosas y que se las responda.

"Usamos toda la inteligencia que teníamos de Profesor Robot para crearla. Es 100% virtual y la modelamos con técnicas de videojuegos y emuladores, pero aplicada a lo que es la robótica. Le pusimos de inteligencia el ChatGPT 3, el de libre uso, entonces podíamos darle bastante inteligencia y aprovechar esta tecnología, la cual el año pasado se empezaba a probar y ahora está en auge", destacó el Mg. Néstor Balich, Director de los Laboratorios de Robótica Física e Inteligencia Artificial y de Impresión 3D, y docente e investigador de la Facultad de TI de UAI.

"Nosotros presentamos a Jaime el año pasado, y ya los asistentes le preguntaban en el canal de Discord y él les contestaba. Lo que hicimos para ello fue adaptarlo a nuevos servicios de machine learning, el mismo que usa ChatGTP y así que aprenda aún más. Con esta tecnología ya en marcha a Elektra le enseñamos, además, otras cosas porque iba a colaborar con el dictado de otra materia de la Maestría en Tecnología Educativa y le pusimos una voz de mujer", detalló.

El Mg. Néstor Balich, Director de los Laboratorios de Robótica Física e Inteligencia Artificial y de Impresión 3D del CAETI.

El proceso

La idea de crear un Profesor Robot que pudiera dar clases acá en Argentina se les ocurrió en 2018, donde en ese momento no existía nada parecido. "Tuvimos que encarar el desarrollo físico del robot, del que hubo varios prototipos, y después la inteligencia, que es donde empezamos a trabajar con IA", rememoró Balich.

"Empezamos con una IA que se llama Bluemix de IBM, que permitía que el robot reconozca rostros, imágenes, hablara con las personas. Pero el programa que desarrollamos en python (tambien fuiemos los primeros en usarlo en la facultad) que realizaba la conversación no tenía IA, sino que usa una base de conocimiento de preguntas y respuestas, una 300 con algunas variaciones de gramita comunes para que interpretara lenguaje natural. Entonces cuando preguntabas, te contestaba, pero sino esta la pregunta no estaba entre estas variaciones, no sabía qué contestarte. Es que en realidad no comprendía el contexto ni la gramática de lo que le preguntabas", aclaró.

Ese trabajo lo hizo junto a Franco Balich, quien en ese momento era alumno de Ingeniería en Sistemas y ahora ya es docente de la UAI. Al año siguiente apareció la posibilidad de crear el laboratorio de impresión 3D y entonces pudieron construir el cuerpo del Profesor Robot. "Ahí progresamos el tema de movilidad y todo lo que era el hardware, y pudimos avanzar un poco más en la IA utilizando diferentes técnicas de aprendizaje automático y librería de chatbot, que en ese momento (2020) ya comenzaban a salir, estaba muy difundida y era una temática en la que había mucho para trabajar y desarrollar", recordó.

Después les surgió la idea crear otro profesor, pero virtual. Eso se comenzó a finales del 2021. "En 2022 presentamos el primer metahumano digital que es una digitalización mía", relató. La misma fue pasada por Berenice Balich, quien es estudiantes de Videojuegos, junto a Martín Medrano (estudiante de 4 año de Ingeniería en Sistemas).

El Profesor Robot en primera plana (i), en su presentación en el acto inaugural del XX CIITI de 2022. Al lado, Franco y Néstor Balich.

Lo digitalizaron con herramientas de diseño y edición digital como Blender y otras de modelados 3D con las que varias fotografías de un humano se puedo crear un avatar 3D de dicha persona. "Luego se pasó a una tecnología de metahumanos de Ureal, que es un motor de videojuegos. Este proyecto lo realizamos completo en el laboratorio tanto hardware, software e IA", aseguró.

En tanto, en el laboratorio de creatividad 3D, se hizo todo lo que es el cuerpo del robot, que está inspirado en un diseño libre francés llamado "inMoov". "Este año empezamos a dictar una materia nueva que se creó en la maestría educativa que se llama 'Robótica, impresión 3D y programación', en donde uno busca usar nuevas tecnologías para que los docentes puedan enseñar, al mismo tiempo que hacemos una actualización de lo último que hay", continuó.

Fue a fines de 2022 que surgió la idea de crear a Elektra. "Es una asistente virtual basada en toda la tecnología que teníamos con Profesor robot. Se llama así en honor a una robot humanoide de la película "Metrópolis", así como habíamos bautizado a Jaime por el robot del "Súper Agente 86", detalló Balich.

Lo que hicieron con Elektra fue entrenarla con lo que dan en las clases de robótica, de impresión 3D, el material de la maestría educativa. "Junto a ella vamos a dar las clases. Por ahora tenemos la imagen y estamos trabajando en su metahumano. Es el primer prototipo y aceleramos su lanzamiento ahora por inicio de las clases. La idea era presentarlo a fin de año en el certamen de trabajos estudiantiles del CIITI, pero lo apuramos por el éxito en las pruebas que realizamos con alumnos pasantes del laboratorio", clarificó.

Se puede interactuar con Elektra a través de Discord y existen varios canales de las materias en los que se puede hablar con ella. Además, se puede hablar también a través de Telegram y de Facebook aunque estas funcionalidades no están activadas todavía. Los alumnos pueden preguntarle cosas y que los ayude a estudiar. "En el momento en que damos las clases o abrimos las consultas, lo prendemos y se pueden interactuar, preguntándole cosas. De hecho, la hacemos armar textos. Parte de lo que se les enseña ahora es cómo utilizar las herramientas de IA dentro de la cursada", concluyó al respecto.

Inteligencia Artificial, en la agenda de sociedad

En marzo, un grupo de expertos internacionales pidieron parar el desarrollo de la Inteligencia Artificial temporalmente, como Elon Musk (fundador de Tesla y SpaceX) o Steve Wozniak (fundador de Apple). Bajo la óptica del docente de UAI, existen dos enfoques sobre esta tecnología a la hora de utilizarla dentro de las aulas.

"Uno que dice que no podés usar la IA en educación y que están muy preocupados por identificar cuando algo lo escribe la IA. Muchos están preocupados por el cambio y que no sea el alumno el que lo haga. Nosotros preferimos el otro enfoque, que es usarlo como herramienta educativa, que lo usen para los trabajos prácticos, generar algo adicional que lo tiene que crear el alumno con la IA, para evaluarlo", destacó.

Aseguró que en el caso de la UAI "podés utilizar el chat para que te ayude a redactar los textos, pero tenés que tener un robot terminado". "O podés usarlo para hacer un trabajo práctico pero vos tenés dar la lección en forma personal, te hacen preguntas que no las puede contestar la IA. Es lo mismo que cuando uno llama a otra persona y le enseña a hacer una tarea. Lo que exigimos es que citen la fuente bibliográfica y consignar que utilizaron la IA para hacerlo".

Aseguró que, después de un tiempo de estar en contacto con los textos de esta IA, uno puede darse cuenta cuando fue escrito por la misma. "Como los humanos tenemos modismos, la IA también tiene algunos. Por ejemplo, que cierra todas las conclusiones con un 'en resumen', y hace siempre un cierre. Tiene el mismo estilo de texto. Otra cosa que tiene, que nosotros hicimos algunas pruebas, es que le dijimos que haga un paper con cinco referencia bibliográficas. El mismo estaba perfecto, pero cuando buscamos las referencias no existían y eran inventadas", contó.

La IA artificial es un programa, que lo que hace es aprender de millones de conversaciones, de escritos en Internet y crea un propio estilo de escritura, pero no se fija si es veraz o no lo que escribe. Respecto de esto, también existen dos visiones encontradas: los tecno-optimistas y los catastróficos. "Yo soy de los primeros, que creen que hay que seguir usándola y hacer regulaciones para regular los alcances e impactos. No frenarlos, pero sí saber implementar y evaluar los impactos", confesó.

En tanto, existe el miedo de que la IA reemplace los trabajos que tienen que ver con producción intelectual. "El primer día que pusieron en línea la última versión de ChatGPT 3 se escribieron 100 libros electrónicos: lo publicaron seres humanos, pero lo hicieron con esta IA. Ahora, si es veraz o no lo que dice, ahí queda en el ser humano. La IA no sabe qué es bueno o que malo, si es verdad o no, o qué puede tener impacto negativo. Había algunas barreras de seguridad que se dieron cuenta cómo saltarlas, porque tiene algunas restricciones para no tocar ciertos temas, algunas protecciones como no escribir más de 1.000 palabras a la vez. La comunidad fue dándole la vuelta para, por ejemplo, escribir un libro completo", informó.

Como hay IA que pueden hacer libros, las hay que hacen imágenes y hasta videos tremendamente realistas, pero falsos. "El colegio de abogados de los Estados Unidos está demandando a una IA porque crearon una página donde esta asesora legalmente. Entonces, lo demandan porque aseguran que está ejerciendo sin tener título. Pueden pasar dos cosas: que la apaguen, o que sea la primera vez que una universidad le de el título a una IA", reparó Balich.

Y concluyó con un dato impactante sobre pruebas que se les hacen a ChatGPT 3 y ChatGPT 4. "Les dieron exámenes que se les hacen a los seres humanos y la primera está entre el 10% de los peores alumnos que aprueban una carrera. ChatGPT 4 está entre los 10 mayores puntajes de la carrera. Ese es el nivel de inteligencia que está teniendo ahora", terminó.