De la televisión al streaming, un nuevo paradigma

El centenario diario cordobés, La Voz del Interior, publicó en su edición del 7 de junio una nota donde analiza los cambios de formatos y temáticas desde el surgimiento de la televisión hasta el advenimiento del streaming, la era de las plataformas y el consumo a demanda. Para abordar este fenómeno, la periodista Noelia Maldonado recurrió a la visión del licenciado Juan Mascardi, director de la carrera de Periodismo en la Universidad Abierta Interamericana Sede Rosario y docente de la asignatura Periodismo Televisivo.

En el artículo "Streaming. Investigaciones periodísticas de casos judiciales: hoy es la era de las plataformas”, Mascardi repasó la cadena de hechos que hicieron que “paulatinamente el ágora de la discusión pública dejara un vacío dentro de la televisión abierta y se trasladara al cable, primero, y después en este salto, con la llegada del contenido on demand”.

En acontecimientos importantes e inesperados de la agenda, como el atentado a la AMIA, el incendio de Cromañón, el estallido de la fábrica militar de Río Tercero, o el caso María Soledad Morales, la televisión mostró las primeras escenas del suceso, realizando documentales e investigaciones periodísticas.

“Décadas atrás la televisión de aire y de cable se encargó de elaborar documentales o investigaciones que permitieran ahondar en esos casos que por sus implicancias y su trama enrevesada generaban la fascinación en masa de los televidentes. Hoy ese espacio para la profundidad se ha mudado a las plataformas de contenido a demanda”, relata Maldonado en su nota.

Este fenómeno, sostiene Mascardi, se debe entre otras razones a que “la televisión abierta empezó a hablar más de sí misma y a ser endogámica. Y eso llevó a la desaparición de dos formatos: los programas políticos y los programas de investigación periodística”. En sentido afirma que la modificación en los hábitos de consumo y distribución, obligaron a “cambiar las formas de producción y las decisiones sobre qué y cómo contar”

Pensando en el televidente/usuario, el director de la Licenciatura en Periodismo agrega que siguen teniendo mucho interés en los casos y las historias que allí se cuentan. “Las plataformas aprovechan una necesidad casi vital de las audiencias de encontrarse con historias reales. Este es un formato clásico que prácticamente surgió con la televisión”, dice y, para ejemplificar, menciona viejos ciclos como el Telenoche de Raymundo Gleyzer, con sus primeros informes.

Actualmente, Mascardi asegura que las audiencias de la televisión abierta quedan casi exclusivamente sujetas a la transmisión de acontecimientos en vivo, programas de servicios o deportivos. Además, están los programas más relacionados al debate con panelistas, que tienen hoy una alta presencia en la pantalla abierta.

El artículo explica que la producción, la investigación y el trabajo periodístico profundo tiene en los nuevos formatos una preeminencia. Mascardi coincide con esta mirada y añade: “La ventaja es sobre todo narrativa, son documentales que se mixturan, se hibridan con formatos narrativos más propios de la ficción, se trabajan con guiones y con modelos de guiones para sostener esa tensión dramática; y eso creo que los hace muy atractivos y que se los mira casi como una novela”.