Estudio de la UAI: uno de cada dos argentinos perdió a un amigo o familiar por coronavirus
El Programa de Estudios de Opinión Pública de la Universidad Abierta Interamericana (UAI) encuestó a 400 personas mayores de 16 años sobre cómo vivieron la pandemia. El estudio expuso que el 52.7% de los consultados perdieron a un familiar o amigo a causa del virus
En el programa Radiópolis, conducido por Roberto Caferra y que se emite en la primera mañana de Radio 2 de Rosario, entrevistaron al Dr. Gerardo Laube, infectólogo y docente de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universidad Abierta Interamericana, para analizar los resultados de la muestra (escuchar nota completa aquí).
Mientras avanza la campaña de vacunación en la Argentina con apuro por la posible llegada de la variante Delta de coronavirus, ya han pasado más de un año y medio de pandemia donde se sufrieron muchas pérdidas y cambios. La encuesta sondea la percepción de lo vivido, sobre lo que viene, la combinación de vacunas y las costumbres que envuelven el día a día con la enfermedad como protagonista.
El 52,7% de los indagados afirmó que perdió un familiar o amigo debido al Covid-19, mientras que el 47,3% contestó que no. Actualmente, el 93,1% dijo estar vacunado y sólo el 6,9% de los que respondieron no lo hicieron mientras que, de esa gran mayoría inmunizada, el 71,7% aseguró haberse dado una dosis y el resto dos.
Respecto del temor por la variante Delta, el 55,1% dijo que el tema le da entre mucho y bastante miedo, mientras que el 35,9% dijo poco y nada. “Las vacunas son insustituibles, es la única forma de cortar con las cadenas de contagios. Sin embargo, hay un temor todavía de lo que significa la variante Delta, por su transmisibilidad. El dato alentador es que con la inmunización las complicaciones y las internaciones serán mucho menores”, afirmó el Dr. Laube.
El relevamiento realizado por la UAI confirma que la pandemia también cambió la manera de relacionarse y las costumbres tan argentinas a las que son difíciles decirles que no. En este sentido, el 29,5% de las personas ya "no saluda con un beso”, el 16,9% dejó de lado las reuniones familiares y el 14,3% hizo lo propio con el mate.
“Lo que uno alienta desde el punto de vista médico es que las vacunas no deben darnos una falta sensación de seguridad. Son un complemento más a las medidas de cuidado en el uso del barbijo, la higiene, el distanciamiento y los cambios en los hábitos de saludo”, aseguró Laube, quien además manifestó: “Si bien estamos esperanzados de tener una temporada de verano más favorable, observando lo ocurrido en países como Israel, Estados Unidos o los estados de la Unión Europea, la variante Delta obliga a una mayor cautela debido a su alta contagiosidad y sostener las conductas de prevención”.