Francisco, de la Argentina al mundo

El portal de actualidad y análisis político "Suma Política+", publicó recientemente un artículo del Dr. Fabián Lavallén Ranea (Director de la Licenciatura en Relaciones Internacionales y la Licenciatura en Ciencia Política de la Sede Rosario) en el cual traza un balance del papado de Francisco, con motivo del noveno aniversario de Mario Bergoglio como Sumo Pontífice.

"Las innovaciones en el Vaticano comenzaron en el momento mismo de su nombramiento, ya que con su designación se dieron simultáneamente varias situaciones de total excepción: un Papa del Tercer Mundo y latinoamericano, un jesuita, un Papa que debe convivir con otro Papa (el Emérito Benedicto XVI) y, por primera vez, uno llamado “Francisco”, con todo lo que implica como símbolo de austeridad y entrega", afirma.

En su análisis el Dr. Lavallén Ranea considera que no existe dudas que, en muchos aspectos, desde los simbólicos y ritualísticos hasta los más complejos y de fondo, Francisco representa una antítesis al modelo de Iglesia que representaba Benedicto XVI. "Pero nosotros, sistemáticos en nuestras rivalidades, hemos llevado esa dialéctica hacia una lectura local de nuestras polarizaciones, queriendo interpretar a Bergoglio, ahora en sus nuevas funciones y responsabilidades, como parte de los sectores en que se divide ideológicamente nuestro país", sentencia.

Asimismo, considera que en lugar de sentir orgullo de ver que es un argentino el primer Papa del Tercer Mundo, y que consigue una popularidad que no se veía desde Juan Pablo, se continua mirando con el prisma vetusto y miope de nuestra política local. "Francisco es un Sumo Pontífice que decidió que si todos los caminos ´no conducen a Roma´, Roma debía moverse y trasladarse hacia todos los caminos, y todas las periferias. Pero no sólo a las periferias geográficas, sino también a las espirituales. Bergoglio les habla a los puntos cardinales del mundo, no a los resquicios de nuestras peleas y desacuerdos", concluye.

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