La importancia de participación activa del paciente en su tratamiento: consejos para elongar el cuello de forma correcta
Por Anabel Kluz. Licenciada en Kinesiología y Fisiatría (UAI).
Como Kinesióloga aprendí a pensar en cómo acompañar a mis pacientes y alumnos de pilates y stretching a la distancia. Para ello me fueron útiles las herramientas informáticas y diferentes aplicaciones que me permitieron hacer videollamadas.
Como eterna alumna tuve que autogestionarme y pude ver que las formaciones online son un recurso muy valioso, que me permitieron estar actualizada a pesar del aislamiento impuesto.
Las diferentes aplicaciones del celular y la computadora hicieron posible estar en las casas de alumnos y pacientes, atender sus necesidades y no dejar de movernos.
Pero todo no fue fácil ya que tuve que aprender a evaluar observando cada movimiento y aprender a escuchar atentamente, teniendo en cuenta que para un kinesiólogo sus mejores oídos y ojos están en sus manos.
Un exhaustivo interrogatorio, diferentes test y la observación fueron mis aliados para obtener un diagnóstico, o aproximación del mismo, y armar un plan de tratamiento. El mismo incluía ejercicios de movilidad, estiramiento y autocorrección postural.
Para mi grata sorpresa, después de varios días de trabajo diario por parte del paciente, me llegaba un WhatsApp que decía: “Estoy caminando por la casa sin dolor”. Y herramientas que ya conocíamos, como la elongación, fueron de gran utilidad para obtener resultados positivos.
En relación a mi experiencia, en cuarentena reafirmé el concepto de lo importante que es la participación activa del paciente en su tratamiento y, en consecuencia, de su mejoría.
Ahora los invito a ustedes a cuidarse. En esta esta oportunidad, de forma breve, les dejo algunos consejos que suelo compartir con mis pacientes cuando están con dolor de la zona cervical.
Primero, si hay dolor hay que escucharlo. “Es la sirena que nos avisa del incendio”, algo no está bien. No nos acostumbremos a vivir con dolor.
Por otro lado, resulta fundamental -ante la presencia de dolor- consultar al médico para arribar a un diagnóstico y así descartar patologías que necesiten tratamiento médico específico, a su vez, resulta de gran importancia consultar al Kinesiólogo para la evaluación kinésica.
Ahora bien, si sabemos que el dolor es por tensión muscular hay tarea por hacer, por parte del kinesiólogo y por parte del paciente.
El dolor de cabeza y cuello, así como diferentes patologías en vértebras cervicales, patologías de la ATM (articulación temporo-mandibular) y el bruxismo pueden ser producto de malos hábitos posturales.
Trabajos que nos exigen muchas horas frente a la computadora y/o hacer esfuerzos que comprometen a la columna, o las noches sin dormir, así como otras causas de carácter emocional, y la combinación de todas estas alteran nuestro cuerpo y este se expresa con dolor.
¿Qué hacemos entonces? Una opción es aprender a elongar el cuello de forma correcta.
Les dejo un video (VERLO EN YOUTUBE) en el que veremos cómo elongar los músculos del cuello (zona anterior del cuerpo) y la nuca (zona posterior).
Llevaremos al músculo a su máxima posición de estiramiento de forma suave y sostenida y permaneceremos en dicha posición por al menos 60 segundos, volviendo a la posición inicial lentamente. Uno puede repetir el estiramiento de cada musculo o grupo muscular las veces que lo necesite en un momento del día o repartidos en el trascurso del día.
Me gusta hacer hincapié en la zona anterior que suele ser la “olvidada” porque duele en la nuca o la cabeza o sentimos cargados los hombros y no pensamos que tenga relación la musculatura que está en la parte anterior del cuerpo.
Músculos como el ECOM, Escalenos, Supra e Infrahioideos que encontramos en el cuello comunican por sus inserciones al cráneo, las vértebras cervicales, al tórax, asimismo, intervienen en la función Inspiratoria junto con el Diafragma al formar parte de la "Cadena muscular Respiratoria” descripta por Leopoldo Busquet.
Dicha cadena muscular, desde el enfoque aportado por Philippe Souchard… “es un concepto funcional, y no anatómico, que representa a un conjunto de elementos que se encuentran asociados a una función determinada”, como puede ser la función de respirar; un tema amplio que simplemente los introduzco.
Creo que la recuperación de la salud es responsabilidad de cada uno, es un trabajo diario, de cambios de hábitos, de ejercicio y movimiento.
Este año escuché un concepto/una frase que hice mía y que busco aplicar: “El fisioterapeuta/kinesiólogo es un facilitador del cambio que debe llevar a cabo el paciente para sanar”. Por esto me gusta además de tratar, educar al paciente en cómo cuidarse, en cómo moverse y ejercitarse correctamente, en como relajar el cuerpo y calmar el dolor.