El Dr. José Balmaceda es graduado de abogacía de esta Casa de Altos Estudios. Realizó su tesis en derecho del deporte, una novedosa área que ha sido poco investigada y explorada hasta el momento. Fue así que su tesis se convirtió en una valiosa contribución en dicho campo, por lo cual decidió editarla y publicar su primer libro con el título: El contrato de Trabajo Deportivo. Análisis de la Ley 20.160. La crisis del sistema de renovación unilateral. Amablemente nos permitió entrevistarlo y esto nos contó.
¿Cuándo comenzó el proyecto del libro que publicó?
El proyecto del libro surge al realizar mi tesis de grado, para la cual estuve trabajando cerca de siete meses. Con un tema único, por lo novedoso, y la dificultad de contar con escasos recursos bibliográficos, debido a la escasa difusión del derecho del deporte, tuvo cerca de trescientas veinte páginas. Luego de exponerla ante el tribunal de tesis y lograr recibirme, con mi mujer, Gabriela, se nos ocurre editarla como un libro, con el objetivo de aportar un pequeño granito de arena a esta novedosa rama del derecho del deporte. Y así fue como la Editorial Cáthedra Jurídica, con mucho interés en los temas pioneros del derecho, hizo el resto.
¿Cuál fue el objetivo que se planteó cuando comenzó con la elaboración del libro? ¿Se cumplió?
El tema elegido (la cláusula de renovación unilateral) representaba un verdadero desafío por dos aspectos, primero porque trata sobre un fallo internacional del Tribunal Arbitral del Deporte (TAS), que resultaba muy novedoso al momento de comenzar mi tesis, al cual pude tener acceso gracias a mi tutor el Dr. Prof. Norberto Outerelo; y en segundo lugar, por el reto de escribir y brindar una pequeña solución a un conflicto nacional no abordado por la doctrina. Ello me representó grandes esfuerzos de estudio en el plano internacional, lo cual posibilitó esbozar las respuestas jurídicas que incorpora mi trabajo. El objetivo, entonces, radicaba en la solución de un conflicto que se encuentra presente en la actualidad, a través de este recurso tan útil que propone la UAI como son las tesis de grado; y sin dudas, lo considero satisfecho.
¿Qué sentimientos surgieron en usted al momento de salir al aire su obra?
Creo que la palabra que mejor describe mi sentir, es orgullo. Esto, debido a la inmensa cantidad de horas de trabajo, los incontables artículos y libros consultados y las semanas y meses invertidos. Asimismo, me satisface compartir este sentir con mi facultad de derecho, dado que he realizado la presentación del libro allí, conjuntamente con las autoridades y profesores de la UAI, el Dr. Alejandro Laje, el Dr. Norberto Outerelo y el Dr. Ricardo Frega Navia. En el mismo sentido, aportó a mi alegría saber que es la primera vez que un alumno de la UAI edita un trabajo final. Por lo tanto, no tengo más que palabras de agradecimiento para mi facultad y sus integrantes.
¿Qué le aportó la UAI en sus años de estudio?
Como primera medida, el conocimiento necesario para desarrollarme como abogado en la actualidad, tanto en el plano teórico como en el práctico. Asimismo, y gracias al valioso aporte de cada docente que he tenido, puedo disfrutar de las herramientas necesarias para cumplir con tal fin, objetivo básico de todo estudiante. Algo para destacar es que al día de hoy mi facultad sigue aportando en mi saber, desde otro plano, ya que me posibilita desempeñarme como auxiliar docente en la cátedra de derecho del deporte.
¿Cómo ve la relación entre los estudiantes y la lectura?
De seguro, este ha sido (y será) un tema digno de los más profundos debates entre los especialistas. Sinceramente, no me considero en cierta medida calificado para abordarlo; aunque, amén de ello, puedo aportar sobre mi experiencia como estudiante. El placer de la lectura, a mi criterio, resulta uno de los bienes preciados en la suma del conocimiento. En mi carrera universitaria, he tenido que leer doctrina sobre temas muy interesantes en la faz del derecho, que mi interés me obligaba a profundizar. Pero asimismo atendía, sinceramente con algún desgano, a aquellos otros que no lograban despertar mi fascinación. A manera de consejo, nunca desvíen los ojos del objetivo por el cual estudian, de seguro habrá piedras o palos, pero está en la habilidad del estudiante sortearlos.
¿Qué planes tiene a futuro?
Actualmente se encuentra en edición un segundo libro, con la Editorial Cáthedra Jurídica, en conjunto con la Dra. Gabriela Casimiro, también egresada de la UAI, el cual verá la luz en el mes de julio de 2009. De la misma forma, seguir disfrutando de las clases en la cátedra de derecho del deporte en la universidad. Desarrollar mi profesión. Y la más importante, continuar en el aprendizaje del derecho; cuestión que, creo, nunca acabará.
