David Alexander Calderón Arregui: Un Líder Transformador en la Educación Superior
David Alexander Calderón Arregui, un académico ecuatoriano de destacada trayectoria, ha marcado un hito al convertirse en el primer Doctor en Educación Superior Universitaria egresado de un programa interinstitucional entre la Universidad Abierta Interamericana, la Universidad Austral y la Universidad Nacional de Río Negro (UNRN). Su logro trasciende las fronteras de lo personal para establecerse como un aporte significativo a la transformación de la educación superior en Ecuador y América Latina.
Con una sólida formación académica, David cuenta con un Doctorado en Educación Superior Universitaria, complementado por múltiples posgrados realizados en España: un Máster en Dirección y Administración de Empresas, un Máster en Dirección, Innovación y Liderazgo de Centros Educativos, y un Máster en Dirección y Gestión para la Calidad de Centros Educativos. Además, es Licenciado en Ciencias Militares e Ingeniero Civil por la Universidad de las Fuerzas Armadas ESPE (Ecuador).
En su trayectoria, ha publicado artículos científicos, participado en congresos internacionales y liderado proyectos académicos, siempre enfocado en la innovación, la gestión de calidad y el liderazgo educativo. Su interés particular en el ámbito militar añade una perspectiva única a sus investigaciones, que buscan fortalecer las instituciones educativas vinculadas a las Fuerzas Armadas.
Para David, ser el primer Doctor en Educación Superior Universitaria representa un honor y una gran responsabilidad. “Este logro marca un hito en mi vida profesional y es una oportunidad para contribuir al fortalecimiento y transformación de la educación superior en mi país. Espero que mi experiencia inspire a otros a perseguir metas similares y que juntos podamos construir instituciones educativas más sólidas e innovadoras,” comentó en nuestra entrevista.
El programa interinstitucional fue un factor decisivo para David, quien valoró la diversidad académica y los altos estándares de excelencia de las tres universidades participantes. La colaboración entre estas instituciones le permitió acceder a recursos especializados, una red académica internacional y metodologías de vanguardia que enriquecieron su experiencia doctoral. “Un programa interinstitucional combina las fortalezas de varias universidades, ofreciendo una formación más integral y diversa. Este modelo fomenta la innovación, la excelencia académica y una visión multidimensional para enfrentar los retos actuales en la educación superior,” explicó.
Uno de los mayores desafíos para David fue equilibrar las exigencias académicas con sus responsabilidades laborales y familiares. Sin embargo, destacó que el apoyo de su familia y colegas fue clave para superar este reto. “Aprendí a gestionar mi tiempo de manera estratégica, estableciendo prioridades claras y objetivos alcanzables en cada etapa del doctorado,” relató.
En cuanto a lo más enriquecedor, subrayó la interacción con una comunidad académica diversa que le permitió ampliar sus perspectivas y desarrollar competencias avanzadas en metodologías de investigación aplicada.
David aplica los conocimientos adquiridos en su labor diaria como administrador y líder en instituciones de educación superior vinculadas al Ejército Ecuatoriano. Además, ha trabajado como docente, formando a nuevos líderes en áreas estratégicas.
Entre sus proyectos actuales, destaca el desarrollo de un modelo de gestión integral para mejorar el liderazgo y el clima organizacional en instituciones de educación superior. Este enfoque busca optimizar el rendimiento académico y promover un ambiente institucional positivo y sostenible.
La tesis doctoral de David exploró los estilos de liderazgo y su influencia en el clima organizacional en la Universidad de las Fuerzas Armadas ESPE. Sus hallazgos le permitieron proponer estrategias basadas en evidencia para mejorar el liderazgo y optimizar el rendimiento académico y laboral en instituciones de educación superior.
David visualiza un futuro prometedor para la educación superior en Ecuador, donde la innovación, la calidad académica y la inclusión sean pilares fundamentales. Su objetivo es ser un agente de cambio que fomente la mejora continua, implementando estrategias de liderazgo transformacional que optimicen la gestión institucional y fortalezcan la formación integral de los estudiantes.
“Mi visión es liderar instituciones educativas hacia un modelo más inclusivo y sostenible, donde la investigación y la innovación sean motores de desarrollo social, económico y cultural,” afirmó.
David dedicó palabras de agradecimiento a su familia, colegas y mentores, destacando especialmente a su esposa, Marisol Godoy, y a sus hijos, Bryanna Valentina y Adrián Mateo. “Ellos fueron mi mayor fuente de apoyo e inspiración durante este proceso. Sin su respaldo incondicional, este logro no habría sido posible,” expresó con emoción.
También agradeció a su directora de tesis, la Dra. Adriana Marrero, por su guía y dedicación, y a las universidades participantes por ofrecer un programa académico de excelencia.
El logro de David Calderón no solo destaca en el ámbito académico, sino que también abre puertas para la transformación de la educación superior en Ecuador y América Latina. Su dedicación, visión y compromiso lo posicionan como un líder clave en la construcción de instituciones educativas más fuertes, inclusivas y preparadas para los retos del futuro.