“Esta relación entre el hombre y la máquina va a seguir profundizándose”

“Los robots, la inteligencia artificial, el automatismo, nos interesa desde distintos lugares, siendo uno de ellos la relación cada vez más próxima que vamos a tener en los próximos años”, señaló el licenciado Gonzalo Zabala durante su entrevista con el programa “La primera de la tarde”, que se emite por Radio 2 de Rosario.

Zabala es docente, director del Laboratorio de Robótica Educativa e investigador del Centro de Altos Estudios en Tecnología Informática. También, es coordinador de las olimpiadas argentinas de robótica, Roboliga, que tienen su correlato a nivel internacional en la Robocup. Anticipando su participación como panelista en el próximo Congreso Internacional en Innovación Tecnológica Informática (https://uai.edu.ar/ciiti/), que se realizará de forma virtual el 28 de septiembre, Zabala dejó algunas definiciones.  

“Nuestra relación con las máquinas, con los robots, con los autómatas seguirá creciendo, aunque no necesariamente tienen que ser humanoides. Efectivamente el humanoide es más una cuestión de las películas, pero en la implementación en la vida real va a tener, en general, otras formas más prácticas que la estructura humana”, consideró

La experiencia profesional que Zabala ha adquirido en la enseñanza de las ciencias y el desarrollo de proyectos de educación tecnológica le permiten afirmar que resulta imperioso la aplicación de la inteligencia artificial y la robótica a la educación formal. “Uno puede tomar a la robótica, algunos aspectos de inteligencia artificial y lo que se llama pensamiento computacional como herramientas educativas fundamentales para la preparación de las próximas generaciones que, en algún momento, van a salir al mercado laboral, al trabajo. Por lo tanto, si nosotros no tomamos responsablemente la necesidad de formación de esta generación estarán absolutamente desguarnecidos en el futuro”, afirmó

“En el mundo que vivimos hay muchas herramientas, principalmente de inteligencia artificial, que pueden ser interesantes para aplicarse en mecanismos de aprendizaje. Estas tecnologías pueden brindarse como contenidos para enseñarles a los chicos y como herramienta para utilizarse dentro del ámbito educativo. Por ejemplo, para hacer análisis de datos, para entender por qué está pasando lo que está pasando”, explicó. Asimismo, consideró que gracias al enorme volumen de información digitalizada se han generado grandes bases de datos que pueden aplicarse a la ciencia de datos, permitiendo obtener conclusiones vinculadas al ausentismo, la performance del alumno, la repitencia o el abandono escolar.

Zabala consideró que algunas herramientas permiten entender cuáles son los problemas de aprendizaje de los estudiantes y de esa manera adaptar, por ejemplo, ejercicios o contenidos, hacer una suerte de curaduría automática para proponerles diferentes opciones a los estudiantes en base a lo que ellos pueden responder en herramientas informatizadas. “Todo eso no tiene ningún tipo de sentido sino está acompañado por la mirada holística que tiene el docente. Los docentes en las escuelas no pueden reemplazarse, pero sí potenciar un montón de aspectos, principalmente lo que es el acceso a la información y el procesamiento de esta”, reflexionó

El investigador advirtió: “Si no introducís a los estudiantes dentro de estos mundos es como no enseñarle leer o escribir. Con estas herramientas y con estas tecnologías van a tener que convivir, y cada vez más”, y sugirió: “Dentro del pensamiento computacional hay mucho de división de problemas, de división de problemas en partes que, más allá del mundo tecnológico, son interesantes de aplicar en cualquier tipo de problema y en cualquier tipo de campo. Poder encarar un problema y analizarlo en diferentes aspectos, poder dividirlo en diferentes problemas, poder depurar o generar mecanismos que me permitan analizar porque un proceso no está funcionando son recursos cognitivos aplicables a cualquier campo”.

Zabala observa que la relación entre el hombre y la máquina va a seguir profundizándose. “Hay cada vez más herramientas automatizadas que hacen la vida más sencilla. En general la tecnología ha beneficiado muchísimo a la población y se puede hacer más segura. Si vamos a los datos duros y bien tangibles con respecto a la expectativa de vida, al desarrollo del sistema de salud, obviamente al alfabetismo, al acceso al agua, o a los servicios sanitarios, la mortalidad infantil, si uno mide estos datos está claro que el mundo ha progresado y lo seguirá haciendo”, consideró y agregó: “También seguimos necesitando gente que luche para que eso alcance a todos y no a unos pocos. No tengo una mirada apocalíptica sobre la tecnología porque es parte de la propia creación humana”.

Finalmente, concluyó que las nuevas tecnologías no tienen ninguna categoría moral, pero como estas se utilizan y que alcances tengan dependerán de la mano del hombre. “A mi entender, de acuerdo con alguna frase que alguna vez escuché, el bienestar individual fuerte y sostenible en el tiempo tiene que estar basado en el bienestar general. Si vos en un sistema tenés una cantidad de excluidos muy grande, la fragilidad de ese sistema es enorme porque genera un tipo de violencia que es incontenible”, alertó.

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